Dicen que las despedidas son amargas, pero a juzgar por las fotos que podemos ver en este artículo y las experiencias relatadas en el mismo, no es el caso de las de ocio y deporte donde participantes y voluntarios recuerdan los buenos momentos vividos durante el curso con la música, la comida y el buen rollo como telón de fondo.

Los participantes de ocio tuvieron como punto de encuentro y despedida la tradicional merienda que se llevó a cabo el pasado miércoles 31 de mayo en el Centro Puentesaúco. A la cita asistieron más de 100 personas que han participado en alguna de las 12 actividades que se han llevado a cabo durante todo el año y, como no podía ser de otra manera, los voluntarios también compartieron este momento tan especial con ellos.

Comenzamos con un baile (¡nos habían dicho que el que no bailaba no comía!) y después dimos paso a la merendola, en la que todos contribuimos trayendo algo: embutido, empanadas, patatas fritas… ¡hasta una lechuga! Una vez fueron quedando vacíos los platos, se proyectó un vídeo con las fotos de las actividades del curso y del festival de primavera, al terminar y tras un largo aplauso, nos dimos un fuerte abrazo, con la ilusión de volver a vernos el curso que viene.

Por otro lado, el hotel Puerta de Burgos acogió el acto de cierre de la temporada del club deportivo Puentesaúco.

La del pasado viernes 2 de junio es una de esas fechas del calendario que ningún deportista del CD Puentesaúco quiere perderse. Por eso, a la cita en este hotel burgalés acudieron cerca de 80 personas, entre ellos, deportistas, voluntarios y técnicos del área de Ocio, Cultura y Deporte de ASpanias.

“Yo, menos uno, he ido todos los años”, recuerda Eva Macho, deportista del CD Puentesaúco, y “a la que no fui era porque estaba lesionada”. Eva juega a baloncesto, hace natación y practica senderismo. Sobre cómo le ha ido este año a su club, dice que “bien”.

El encuentro (organizado por el área de Deporte de Aspanias desde hace más de 15 años) se convierte también en una ocasión excelente para reunirse en torno a una mesa y recordar los mejores momentos de la temporada y cómo se presenta la que viene. Una reunión también de hermandad porque propicia la ocasión de charlar, recordar anécdotas y renovar amistades.

Es una buena oportunidad “para ver a gente que hace tiempo que no ves y así nos vemos todos los deportistas, y en mi caso, a gente de Quintanadueñas que hacía tiempo que no veía”, dice Eva.

Uno de los momentos más emotivos de la cena, fue cuando todos a una se lanzaron a cantar el cumpleaños feliz a uno de los voluntarios, Rubén Daspet, entrenador de atletismo. “Lo pasé muy bien celebrando el día de mi cumpleaños con ellos”. Rubén destaca una vez más la “ilusión que le hace ver cómo estas personas siguen adelante con el deporte”. “Me gusta ver cómo expresan su admiración por el trabajo deportivo que realizas con ellos”, comenta satisfecho.

La de este año, ha sido para Rubén su segunda cena. “Lo pasamos muy bien en la fiesta”, ya que después de la cena, les esperaba a todos la discoteca “que tanto les gusta”.

Desde el área de Ocio Cultura y Deporte de Aspanias os deseamos a todos un feliz verano y os recordamos que esto no es una despedida sino un "hasta luego".>