El pasado sábado 4 de noviembre, se celebró en Ávila una sesión formativa titulada “La inclusión escolar, laboral y social se inicia en la familia” llevada a cabo por la Escuela de familias y discapacidad de la Fundación Mapfre.

Hasta allí, se trasladaron 6 familias acompañadas por un técnico de Servicios Asociativos. La jornada comenzaba con una conferencia de Gonzalo Berzosa, Director de la Escuela de Familias y discapacidad de la Fundación Mapfre. Su título ya nos adelantaba la importancia del tema a tratar, “en la vida familiar se aprende la autonomía personal”. Durante algo más de una hora, Gonzalo nos explicó los cambios a los que se enfrentan las familias de personas con discapacidad en la actualidad. Tanto las entidades, como las familias y, por supuesto, las personas con discapacidad intelectual tenemos que dejar de trabajar por la integración (centrada en carencias, deficiencias y limitaciones) y centrarnos en la inclusión, que se basa en promover recursos, posibilidades y oportunidades.

Es dentro del núcleo familiar dónde la persona con discapacidad intelectual comienza a desarrollar su autodeterminación. Esta, crece con los apoyos que se le presta y disminuye cuando se les trata con un exceso de protección (sobreprotección). Cabe destacar que todas las familias tienen a su alcance los recursos necesarios para promover la autonomía de sus hijos, estos son; confiar en sus capacidades, apoyar las actividades que deseen hacer y, participar y colaborar con la entidad en la que su hijo/hija se encuentra.

Y es que, es importante que todos juntos trabajemos para que la autonomía de las personas con discapacidad no sea solo algo teórico. Tras la conferencia de Gonzalo Berzosa, se llevó a cabo una mesa redonda en la que tanto familiares como profesionales mostraron su punto de vista sobre este tema. Partimos de una visión diferente, incluso dentro de las familias (no es lo mismo ser madre, padre, herman@ o abuel@...) se ven estas diferencias, pero lo importante es caminar juntos, porque cómo expresó Gonzalo “Nadie sabe tanto como todo juntos”. Y es importante tenerlo en cuenta; las entidades necesitamos a nuestras familias, al igual que las familias necesitan el apoyo y los servicios de sus entidades.

Fue, desde luego, una mañana muy productiva para las familias que desde Aspanias estuvieron en esta sesión formativa. Puntos de vista diferentes, padres con hijos en empleo, padres con hijos que todavía no han cumplido la mayoría de edad y también una hermana que, como ella misma expreso, tiene que batallar porque sus padres no se excedan en la protección hacía su hijo con discapacidad intelectual y/o del desarrollo.

A pesar de la lluvia, la jornada termino con un picnic en el que nuestras familias compartieron impresiones y valoraron la jornada de manera positiva, llevándose a casa aspectos importantes sobre lo que reflexionar.