Sirvan estas líneas para expresar nuestro agradecimiento a todo el personal de la residencia Río Arlanza, de Salas de los Infantes. Como no queremos dejarnos a nadie hacemos hincapié, especialmente, a quienes prestaron sus servicios desde septiembre de 2017 hasta el 5 de enero pasado.

La dirección y enfermería, porque una vez agotadas todas las posibilidades médicas, actuaron centrándose, exclusivamente, en facilitar a nuestro padre -Tirso- toda la calidad de vida posible y permitiéndonos el acompañamiento, cosa que consiguieron. También todo el personal auxiliar porque en todo momento tuvieron, tanto con nuestro padre como con nosotras, un trato exquisito, y más concretamente en la larga última etapa por su cariño, generosidad y delicadeza con que le trataron.

Ya que las residencias de ancianos están tantas veces en tela de juicio, quisiéramos ser justas y manifestar a la dirección que no solo son grandes profesionales, cada una en su especialidad, sino auténticas catedráticas en humanidad, asignatura que no se aprende en una facultad. A todas las personas que va dirigida esta carta. Muchas gracias y a ti querida Esther, por favor, no cambies ni permitas que lo haga la institución que diriges.

Paula y Mariví Vicente / Salas de los Infantes

Publicado "Cartas al Director" - Diario de Burgos 12 de enero de 2018