La relación del CD Puentesaúco con el UBU Colina Clinic (Aparajedores Rugby Burgos) nació hace algo más de un año, y la colaboración entre los jugadores de uno u otro lado va tomando cada vez más cuerpo. Digamos que deportistas del club deportivo de Aspanias van entrando en la cantera de este Club que juega en la División de Honor, y que ha apostado por el rugby inclusivo sin pensárselo dos veces. Y en esta apuesta ha entrado Aspanias en su terreno de juego. Juntos por una escuela de rugby inclusivo.

El Complejo Deportivo San Amaro (Burgos ciudad) es el campo de referencia del UBU Colina Clinic. A este terreno de juego acuden a entrenar cada sábado 15 deportistas, 5 mujeres y cuatro hombres, del Puentesaúco. "A mí me gusta este deporte porque me desestresa", admite Rocío González, una de las cinco chicas que se han apuntado al rugby (que compatibiliza con otras prácticas deportivas deporte como el baloncesto y la montaña). Rocío afirma que "(el rugby) fomenta valores como el respeto, compañerismo, diversión y entretenimiento", y reconoce que "pensaba que era un deporte para chicos, pero las chicas también pueden".

Rocío González expresa su deseo de disputar pronto un partido de rugby, pero reconoce que aún les queda “mucho que aprender".

Lo cierto es que los chicos y chicas del Puentesaúco "vienen muy ilusionados y con muchas ganas a los entrenamientos", y la idea a futuro es que se vayan integrando en la "cantera del Aparajedores Rugby Burgos (que ya cuenta con equipos en distintas categorías)", afirma Rubén Daspet (técnico deportivo de Aspanias).

La apuesta de ambos clubs por la escuela de rugby inclusivo sigue adelante con el objetivo de que al cierre de la temporada se pueda jugar un partido amistoso, y en un futuro participar en la liga de rugby inclusiva”.