Mantener los principios y valores de la organización en el contexto de la economía social, ha sido para la mayor parte de los grupos de interés del Grupo Aspanias, la mejor muestra de validez, de valentía y en definitiva, de la vida del Proyecto Aspanias, permanentemente dirigido a mejorar la vida de las personas.

El movimiento social renovado como garantía de existencia de los recursos, como elemento de participación democrática y también garantía de la calidad en la atención a las personas con discapacidad y especialmente en su doble faceta de movimiento promotor de iniciativas, también de cambio social y a la par como “clientes” de servicios asociativos, de promoción y de garantía de calidad de vida familiar. El futuro se sustenta en un movimiento social activo, comprometido en términos de buen gobierno y transparencia institucional.

El Grupo Aspanias con dificultades de desarrollo y de adaptación a los nuevos tiempos, aparece como un soporte suficiente para perseguir el objetivo de empresa social, del nuevo formato de financiación apoyado en el impacto social y también instrumentalizado en la formula del contrato social.

La oposición sistemática, la crítica desmedida, aunque minoritaria, incluso en ocasiones anónima y cobarde, no ayuda a la reflexión sosegada y responsable que queremos y necesitamos. Hemos guardado silencio mediático para no incrementar el “ruido deseado” por quienes lo provocaban y especialmente para no herir ni importunar a usuarios, familias y profesionales del Grupo. Hemos priorizado nuestra obligación de conservar la vida de nuestros usuarios atendidos (efectos de pandemia) y apoyar la mejor vida posible tanto del resto de usuarios y de sus Familias, a través del teléfono en acompañamiento psicológico, humano e incluso material.
No merece la pena abundar en datos, pero si es obligada una pequeña referencia en cuanto que un año difícil por la pandemia, contamos más de 950 intervenciones en casos concretos a través del teléfono, de visitas, de consultas,… hemos mantenido el dialogo con familias e incluso con un grupo en desacuerdo en más de 27 sesiones telemáticas y algunas presenciales con el cuidado máximo de las medidas sanitarias.
Hemos desarrollado más de 670 intervenciones con usuarios, familias, profesionales y socios que indudablemente nos ha ayudado a mantener con realismo y actualidad las situaciones más complejas de este periodo y a tomar decisiones y apoyos orientados a las personas en momentos de dificultad; y que a pesar del esfuerzo y el trabajo extra, nos ha reconfortado enormemente, pues hemos cumplido con la "idea y Filosofía" Básica que engloba a nuestra asociación y a nuestros movimiento y que no es otra que la ayuda constante a las personas dependientes y muy especialmente a las que están bajo nuestro cargo y amparo.
Hemos desarrollado documentos, memorias, justificaciones e informes para más de 20 inspecciones administrativas que, a pesar de ser recurrentes y persistentes nos han dinamizado en el análisis, en la calidad y en la respuesta. Inspecciones que valoramos positivamente en cuanto a la "supervisión y control", no así en cuanto a la sensación de "estar en el punto de mira" de una forma quizás y así lo entendemos, persecutoria.

Es muy motivador tomar el pulso a nuestras familias y socios, que a pesar de las dificultades del último año, aportan iniciativas, identifican necesidades y comprometen participar en la búsqueda de nuevas soluciones y nuevos espacios de atención y de derechos para las personas con discapacidad, las personas mayores y las que tienen dificultades en el terreno de la salud mental. El nuevo formato estructural y la diversificación respecto a colectivos es una cultura ya incorporada plenamente en el Grupo Aspanias.

El proyecto de Aspanias iniciado en el año 1964 es atemporal. Sigue vigente en toda su dimensión y lo será en el futuro, pero la forma de llevarlo a cabo debe cambiar y acomodarse al tiempo concreto en el que se sigue realizando. Su proceso de implantación desde el año 1964, es objetiva y evidente la espectacular realidad en el año 2021. Diversas infraestructuras, centros y servicios de atención así lo demuestran. La dignificación de las personas con discapacidad intelectual es un hecho en el que Aspanias ha sido, es y será un eje esencial en Burgos. La profunda transformación que Aspanias ha experimentado desde julio de dos mil veinte, en su estructura organizativa y en el planteamiento de acomodar las nuevas formas de vida de nuestras personas, está dando unos resultados altamente satisfactorios. Todos estos nuevos planteamientos necesitan un necesario impulso económico, sin el cual, es imposible alcanzar las metas y objetivos propuestos.
Será imprescindible la implantación urgente de nuevas tecnologías y mantener como señas de identidad la democracia, el pacto, la negociación permanente, la innovación y el desarrollo necesarios.
Los resultados del Plan de Viabilidad de 2019 y siguientes son positivos y, por tanto, el apoyo y la colaboración público-privada ha de verse reforzada, como ocurrió desde siempre, por un apoyo social intenso que engrandece y humaniza a la propia sociedad.

Es imprescindible mantener la calidad de atención, el contacto permanente y el apoyo adecuado a las personas, a las familias y a todos los colectivos vinculados al Grupo Aspanias. La existencia de la pandemia ha exigido y ha mantenido en un nivel alto de ejecución, la atención a los problemas, a las situaciones nuevas e inesperadas y, en algunos casos, a las graves consecuencias de la pandemia.
De ello, este Grupo de organizaciones, ha hecho su prioridad y su acción permanente, no exenta de dificultades.

El reconocimiento al trabajo bien hecho que, en ocasiones, se ha visto desacreditado en medios y redes sociales, carentes de rigor, objetividad y contraste, lo hemos acometido mediante acciones directas de información a familias, profesionales, clientes y proveedores, administraciones públicas, de forma individualizada, profesional y rigurosa.
Hemos creado, además, espacios de comunicación para valorar y reflexionar con las posiciones de discrepancia, de contaminación y de amenaza para los intereses de las personas, minimizando en ocasiones la eficacia de las medidas, pero seguimos trabajando con la convicción de que el diálogo y la transparencia acabaran en resultados satisfactorios.

Volver a la portada