 Aspanias volvió a desfilar un año más por carnaval. Este año la comparsa salió a la calle con el cartel titulado “Todos iguales, todos diferentes”. En torno a esta leyenda se agruparon cerca de 100 personas vinculadas a la entidad (familias, personas voluntarias, profesionales y personas con capacidades diversas), vestidas con un disfraz estampado en coloridos tréboles de cuatro hojas y acompañados de la palabra Plena inclusión. De este modo han querido mostrar en el Carnaval de Burgos 2016 la nueva marca que adoptó en 2015 el movimiento de la discapacidad intelectual.
 “El disfraz de este año me ha parecido muy bien y la gente ha sido amable con nosotros”, resume José Luis Gómez “Condi”, uno de veteranos del carnaval. “A mi gusta ir de carnaval, todos los años salgo, aunque este año hemos tenido que sujetar bien la pancarta porque soplaba el viento y hacía mucho frío”. Condi recuerda con cariño los disfraces que se ha puesto durante todos estos años, pero especialmente, el año que salieron con un traje de payaso.
 Quien también recuerda bien los disfraces de años anteriores es Carmen Hierro, madre voluntaria en las tareas de cortar, coser y probar los disfraces, aunque este año “se han encargado los voluntarios y voluntarias de hacerlos”. Carmen reconoce que tiene “unos cuantos guardados en casa”. Además del trajín de modista a Carmen también le gusta desfilar en carnaval.
 El Carnaval de Burgos es una de las oportunidades más abiertas e integradoras que ofrece la ciudad para que las personas con capacidades diversas gocen plenamente de los acontecimientos que se producen en su entorno ciudadano y se muestren sin cortapisa alguna. Como resume Blanca Ordóñez (técnico de Ocio, Cultura y Deporte) “es una forma más de participación ciudadana dentro de la oferta cultural de la Ciudad de Burgos que favorece la inclusión”. |
