Hoy es 7 de abril, y por tanto, día en el que cada uno de nosotros, cada una de las personas que somos y formamos parte de Aspanias, debemos decirnos al cruzar nuestros caminos, nuestras miradas o estrechar nuestras manos, ¡felicidades, gracias por cumplir!

Y es que no todos los días se cumplen 53 años. Que son los que han trascurrido desde que aquel 7 de abril de 1964, nuestras familias, las familias pioneras de nuestra organización, dieron un paso al frente y dijeron que algo importante y grande debían crear para el futuro de sus familiares. Un recuerdo para ellas, y cómo no, el eterno agradecimiento de quienes hemos tomado su relevo.

Y desde aquel martes hasta hoy viernes, han pasado ya 53 años. Tiempo en los que nuestra organización se ha comprometido con tantas personas como personas se han comprometido con la organización. Pero en cualquier caso, y superando lo que se suele decirse en estos casos, lo importante para nosotros, para el proyecto Aspanias, no es haber llegado, sino haber cumplido y nuestro deseo de seguir cumpliendo. Porque si no cumplimos día a día con cada una de las personas que acuden a nuestros servicios de apoyo, de nada vale acordarse de nuestro proyecto cuando llegan fechas señaladas.

En nuestro caso, cumplir se traduce en saber escuchar, en apoyar de la mejor manera, en desarrollar atenciones éticas, en intervenir sobre las realidades que generan dificultad para las personas, en generar nuevas oportunidades, en involucrar a cuantos más mejor, en cuidar a nuestros activos, en transformar nuestros entornos, en... En definitiva, cumplir es lograr que el todo sea más que la suma de las partes.

Así que hoy, cuando coincidamos, cuando coincidáis por la calle, en casa, en el aula, en la oficina o la nave; ya sabéis, digámonos ¡felicidades, gracias por cumplir!